069 - Segundo pueblo


Voy al segundo pueblo. Y HAY NUBES... ¿no?




Por mis hábitos nocturnos de no dormir hasta bien tarde, solo tengo 3 horas de sueño en el cuerpo. BI-EN.


ATENCIÓN QUE VIENE TOCHO BIEN GORDO


Esta vez, atino bien con todo y no se me olvida nada. Incluso me da tiempo a hacerme un selfie. Con la cara de "quiero seguir durmiendo y que le den a los videos"


El último autobus para volver, es a las 6 y media. Durante TODO el día he tenido la duda mas grande de universo por culpa de lo que dijo el conductor del autobús: "El último autobús es a las 8 y cuarto de la tarde."


¿Qué? ¿A quién debo hacer caso? ¿Y si se está equivoando?

Llego, gracias a mis levantamientos matutinos y a que terceros no esta interfiriendo, a la hora prevista. Me da tiempo a hacer una introducción al pueblo y de hacer fotos a graffitis.


Pues nada, me empieza a saludar todo el mundo, como suele pasar en los pueblos. Me empieza a dar verguencita de nuevo hablar debido a que el pueblo esta en modo silencio y se escucha hasta el frotarse de las patas de las moscas. Pero lo supero.

Aun así, aunque hable en voz muy alta, no se que tiene mi voz, que se escucha muy baja en las camaras. En todas menos en el movil. Y esta última es en la que peor se escucha. En fin.



Que de entre la soledad que había en el puerto, aparece una pareja con su hija, y se ponen allí a jugar. Por suerte yo ya estaba terminando.

Me hice un orden: 1 hora para cada lugar a visitar. Y el primero iba a ser... La casa natal de Juan Ramón Jimenez


Se me echó el tiempo encima, y menos mal, que me fui, pues habían aparecido de repente un grupo infame de niños todos vestidos iguales con ropas naranjas.

En fin. Que todo bien. Me voy a la iglesia de Nuestra Señora de la Granada, la cual, estúpidamente confundí con Santa Clara, aun sabiendo cómo es y donde está. Pa darme de comer a parte...


No me gusta hacer ruido, por más mínimo que sea, en un lugar donde hay gente rezando, o simplemente sentada. Y por ello, cambié al móvil en silencio, que tampoco es que sea peor que Nikki. Y de entre las cosas curiosas, esto. ¿Que es? ¿Porque está roto? ¿Qué ocultaba? ¿Quien lo hizo?


Podría habérselo preguntado al cura que andaba pululando por allí, pero me miraba raro desde el mismo momento en que entré. No se, algo así como: "Qué haces entrando en esta iglesia, esta CASA DE DIOS, este lugar sagrado para hacer fotos a los santos y mi virgen??. NO PROFANES, ATEO DE MIERDA".

...Si, así me sentí mas o menos.

Despues, a la salida, vi a tres señoras. Una de ellas, llevaba un ramo de flores marchito. Y las otras dos venían de otra calle y la llamaron para preguntarle que qué era eso que llevaba. Las dos se pusieron tan: "oi oi oi oi, estas flooooores, pero están mu seeecas" toqueteandolas hasta romper todo el ramo. Las mujeres se quedan un poco "uy, que se ha roto", pero ya está. La portadora, dice: "no importa, da igual, ya no hay remedio". Esa cara de pena de la mujer... Maldita sea, esa cara de pena....

Total, Que seguí mi camino, esta vez a Santa Clara, un monasterio, ENORME. El sol estaba apretando cada vez mas, y me lo encontré abierto. Llegué a la hora justa. Pero estaban las puertas interiores cerradas. De repente, una de ellas se abrió dejando salir a un chico hablando por telefono que iba directo a otra puerta con las llaves, mientras le seguían dos personas mas. Les seguí con la intención de unirme o preguntar. Cerraron la puerta en mis narices. Asi que pensé: estarán haciendo cosas en el monasterio y no podrán atenderme. Me quedé 20 minutos y me di cuenta que habían pasado de mi.



Pasaron por allí unos extranjeros y una pareja. A ambos les pasó exactamente lo mismo. Viendo que tenía el tiempo muy justito, decidí continuar con el Moguertour y me fui en busca del castillo.

El castillo estaba oculto entre casitas blancas y la entrada oculta en un parking. Como los muros se confundían con las casas, apenas se apreciaban.



























Cuando entré, encontré un escenario y un montón de asientos. El castillo, en ruinas, se había transformado en un lugar para conciertos. No se pudo entrar en ningún sitio porque no había lugar donde entrar.



A la salida, hice unas tomas de esas de las de dejar la cámara en medio de la calle e irme dejándola sola. El caso es que esta vez, no estaba solo en la calle como en Palos, había bastante gente. Y, sinceramente, nadie miró siquiera la cámara. Al final, todo depende del lugar en el que estés y del tipo de gente que haya. Supongo que hay que saber leer la situación y el lugar. Aunque también influía que estuvieran tomándose el bocadillo unos policías al lado. Un día me quedo sin cámara, eso lo se ya, todo por sacar una buena toma. En fin...

Me fui en busca de comida y me fui al único sitio que conocía que me daban cantidad: El Yunta


¿Estaba puesto en otro lugar al que yo recordaba? ¿Acaso es que han remodelado todo el local? ¿Se han cambiado de local? Recuerdo que tenían una parrilla de leña gigante a la vista donde hacían las comidas y siempre estaba lleno de gente (el local, no la parrilla).

En fin, no se, son la misma gente desde luego, me pedí lo mas barato: una tapa de Ensaladilla Yunta y hamburguesa completa.


Me hizo gracia el palillo que atravesaba la hamburguesa.


Me fui a los baños y me encontré con un grifo que no supe de su funcionamiento o si estaba roto o yo que se...


Y después de beberme un litro de agua, salí a buscar información de mi vuelta a casa. Lo resumo bastante bien en este vídeo.


Pues bien, con la palabra del conductor de que aparecerá a las 8, tenía 4 horas para ver 3 lugares. Pero no abrían hasta las 4 de la tarde. Me quedaba poco mas de media hora vagabundeando en un pueblo donde estaba todo muerto, sin nadie, en el pico de más calor, y con todo cerrado. Localicé el lugar e hice lo que considero lo más inteligente del día: Me fui a descansar al interior de La Caixa.


Tenían aire acondicionado dentro y al estar en un interior, estaba en sombra. Fressssquittoooo. Tengo un vídeo en el que lo explico, pero no se si lo incluiré o no en el Vlog, así que... No lo pondré aquí.

Pues nada, tenía la alarma por si me quedaba ahí enmorriñado, ya que literalmente, y no exagero nada cuando digo que no había NADIE. Total, que a las 4 en punto, aparecío un señor en bici que fue a sacar el dinero, yo me recogí porque debería de estar abierto ya el sitio. El señor, muy amable y simpático, empezó a hablar en ruso o idioma del este por el movil y me fui a la Casa Museo Zenobia Juan Ramon Jimenez.


Antes de entrar tuve una situación problemática: El timbre. Era del siglo catapún y no sabicomo funcionaba. Menos mal que la chica de dentro me vio pasarlo mal y me abrió la puerta. Me enseñó a usar el timbre y era jalando con fuerza. Pues muy bien. Aprendí a usar timbres de los años 50.

Solo disponía de una hora, por lo que rechacé la visita guiada, aunque me hubiese encantado hacerla. Y entre que me pongo a leer las cosas, busco buenas fotos y me pongo  agrabarme a mi mismo, esa hora, se quedan muy cortas, la verdad.

Especial atención a los interruptores de la luz, que me llamaron la atención de sobremanera. La casa entera era como estar en una película antigua. Me encanta.


Bueno, entera, entera...

El Portátil de Juan Ramón Jimenez

Había una sala exclusiva para exposiciones de cuadros acerca de platero y tal. Pero lo único que atrajo verdaderamente mi atracción y devoción fue...


Por lo demás, hubo muchos sitios a los que no podía entrar por estar cerrados y me podía la curiosidad. Pero estaba a contrarreloj. Hice muchas fotos (la verdad que menos de las que quisiera haber hecho) y supongo que las subiré a Instagram cuando llegue el momento.

Pues nada, me fui con la promesa de volver con visita guiada. y con el medio correr para llegar a Santa Clara, el monasterio, y encontrármelo...


¿En serio? Pues nada, aproveché para ir a buscar agua como fuera. Me compré dos botellas que bebí en el momento. Volví al monasterio y seguía cerrado. Así que... esperé en la puerta de una casa que había enfrente...


Ya era la hora del siguiente tour. ¿Donde estaba? ¿Por qué seguía cerrado? Entonces miré al final de la calle y vi al hombre de por la mañana, el que hablaba por teléfono. Abrió la cancela y se metió dentro. Me quedé de la misma manera que esa mañana. ¿POR QUÉ PASA DE MI?

Me metí con la intención de hablar con él y decirle que que pasa con su rollo y que quería ver el monasterio. Y me dice: "Tu estabas esta mañana aquí ¿no?, No sabía que querías ver el monasterio". WTF. ¿Pero qué clase de cara tengo que hace que la gente piense que no quiero nada? En Palos me pasó lo mismo con la mujer del restaurante.

En fin. Que empezamos el tour. Pensé que me iba a dar algún folleto, o una de esas grabaciones en los teléfonos portátiles que según que numero marques te da una explicación de la sala en la que estés. Pero no. Tú seguías al tío, y él te decía todo. Lo cual no estaba tan mal, pues había cosas que podías preguntarle.


Pero el hecho es que había mucha presión, pues el tío te decía toda la frase de la habitación en la que estabas de memoria (incluso se refería a mí como ustedes y vosotros) y cuando acababa pasa al siguiente lugar y se quedaba ahí esperándote y mirándote, haciéndote sentir un poco mal y con cierta presión. Ese tiempo te lo concedía para sacar fotos, pero claro... lo que yo buscaba no eran solo fotos...

¿Por qué la visita de esa forma? Bien, pues se lo pregunté. Y me dijo que el monasterio estaba deshabitado y que había lugares que estaban un poco mal de estado y no se podían acceder por seguridad, o mejor dicho, por no hacer un seguro.

Tío... Que la entrada son 3'5€ ¿ese dinero es para él solo? No se, al ser el Monasterio mas grande de España y de tanta importancia... Llámame loco, pero ya podrían arreglar todo un poco para atraer más visitas y que no sea así de restrictiva. Entiendo que haya retablos y frescos muy importantes (que se los están comiendo las humedades, por cierto) y que quieran evitar estropear, pero joder... hay formas de evitar que la gente toque...



En fin, que me fui de allí con un sabor agridulce.

Dos horas me quedaban antes de que llegase el autobús, así que... decidí irme al quinto pino a ver a la Virgen y rezarle fuera del pueblo.

No tengo fotos del trayecto, porque pasaba por polígonos y zonas que parecían habituadas a vender cosas de dudosa propiedad.

Pronto dejé atrás esa zona y comenzaron las casas de campo lujosas con caballos y piscinas. Me adelantaron gente en bicicleta, y niños montados a caballo. y no dejé de encontrarme con mujeres musulmanas con maletas de frente. No se.

El caso es que me encuentro cruzando un riachuelo que pasaba por allí, me asomé y era un río de verdín seco y olores desagradables.

Pregunté a dos chavales negros en bici que por donde debía coger para llegar a la Ermita, por socializar y eso...

Me encontré con dos caminos y decidí aventurarme. y.... LLegué!!


Tenía una sed enorme y tras comprobar que la fuente de allí era un baño termal, le pregunté al que cuidaba todo y muy amablemente me dio agua fría.

Me dio la bienvenida el perro de allí y el dueño me dijo que entrara, que la virgen estaba allí.



Entré con la GoPro activada hasta llegar a la mitad del santuario. No se por qué motivo, pero corté la cámara. No hice foto ni vídeo de la Virgen directamente. Tal vez por respeto a una madre y su hija que estaba allí, pero no me sentí cómodo haciendo foto, así que únicamente me puse delante y la miré.

Donde estaba la virgen, era muy tranquilo, no había mucha luz, solo se escuchaba el sonido del perro que ladraba de vez en cuando en el exterior y el ambiente era bastante fresco. Se estaba muy bien allí. Pero el tiempo... se me echaba encima.

 

Ya había superado en unos minutos mi "punto de no retorno", pero aun así me puse a hacer algunas tomas de los alrededores.


Había una chica de unos 16 años haciendo fotos con reflectores y todo a otra vestida de flamenca. Y yo por al lado dejando la cámara sola mientras me grababa a mi mismo... Vaya cuadro.


La vuelta al pueblo fue muchísimo mas ligera. Era cuesta abajo, no pasaron apenas coches, y las nubes habían tapado el sol y no estaba dando directamente. Así que llegué mas fresco y... Justo a tiempo, pues a los 5 minutos, llegó el autobús.


Y no quiero terminar esto sin antes mencionar que vi a un perro super gracioso mientras estaba sentado esperando. Pues eso. Nos vemos. 





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